30 abril 2020

Vater Unser im Himmel... Un poema de Enrique Baltanás



Para Cristina Brackelmanns,
con el recuerdo de nuestros padres.

AÚN te escucho rezar el Padrenuestro,
"Vater unser im Himmel...”,
que el padre August Stassig te enseñara
(cuando vino hasta Utrera huyendo de los nazis), 
y que de ti aprendí como un legado.
.
Aún por mis ojos pasan las imágenes
de lo que fue tu vida entre la nuestra
y que en el blanco y negro se han quedado,
aguardando en silencio a que les llegue
la hora de alejarse hasta el olvido.
.
Y aún te roza mi mano por la frente,
hasta cerrar tus ojos, que otra luz
seguro que vislumbran ya más pura.
.
Por eso hay muchos días en que rezo
en la lengua tudesca el Pater noster.
“Vater unser im Himmel…Dein Reich komme…
…Unser täglisches Brot gib uns heute…”
Porque en estas palabras es tu sangre
la que corre en mis venas como herencia.

"Dein Reich komme..." 
Enrique Baltanás. Esta sombra que fui.  Ed. Cypress, Colecc. Poesía al albur, 8


Gracias de todo corazón, una vez más, a Enrique Baltanás por este maravilloso poema, tan amablemente dedicado a la memoria de nuestros padres, el suyo y el mío, a los que ambos recordamos rezando en alemán. El poema está incluido en "Esta sombra que fui", su último y absolutamente emocionante poemario.

Gracias también por sus generosas palabras en la entrevista que le hicieron a raíz de la publicación del libro, en las que relata la historia de mi padre, una historia como la de tantísimos otros alemanes, generalmente olvidados, que se jugaron la vida por oponerse al régimen de Hitler. Muchos la perdieron, condenados, deportados o simplemente asesinados; otros consiguieron huir, como el salesiano August Stassig que bautizó a Enrique y enseñó el “Vater unser” a su padre, como Jakob Gapp, el marianista que llegó a Valencia, llevado luego con engaños hasta la frontera para detenerlo en Hendaya, nada más cruzarla, y ejecutarlo en Berlín, o como mi padre, Heinrich, quien, avisado de que su nombre estaba en la lista, y no hacía falta decir qué lista, en el año 36, con la ayuda de la Iglesia y gran riesgo para los que lo ayudaban, consiguió escapar a Suiza escondido bajo la carga de un camión.

“Vidas oscuras” (como las denomina la reciente pelicula de Terrence Malick), pero luminosas todas ellas, sobre todo si viene a rescatarlas de la oscuridad un poema tan hermoso como el de Enrique Baltanás. 
 Aquí dejo sus palabras, y en el enlace del final la entrevista completa:
"José Romero- …Y no solo hay recuerdos o evocaciones al amor en "Esta sombra que fui", sino también referencias al contexto histórico, como el poema en torno al 11-M, o a personas concretas, como Cristina Brackelmanns, sobre la que el lector se queda con ganas de saber más. 
Enrique Baltanás- Cristina Brackelmanns es amiga mía. Su padre era alemán, vino a España huyendo de la Alemania nazi, porque era católico y lo perseguían por su creencia. Se instaló aquí y formó una familia. Mi padre, que aprendió alemán, porque en sus tiempos en el bachillerato se estudiaba ese idioma, lo conoció. Como también conoció y tuvo amistad con un salesiano alemán que recaló en el colegio de Utrera. Ese cura casó a mis padres y me bautizó a mí. El poema “Dein Reich komme”, que evoca el Padre Nuestro en alemán, es un recuerdo que nos une a Cristina y a mí, la memoria de unos padres hablando esa lengua, que, a veces, suena tan dura y extraña, pero no lo es. Es una lengua muy dulce. Lo que pasa es que estamos acostumbrados a escuchar los discursos de Hitler, que ladraba, no hablaba." ....
Esta es la entrevista completa en 41500-Revista Digital de Alcalá: https://41500.info/enrique-baltanas-reloj-ideologico/
.
Vielen vielen Dank, lieber Freund.

4 comentarios:

Jesús dijo...

Qué bonito y emocionante.

Cristina Brackelmanns dijo...


Es un poema bellísimo, una oración en sí mismo.
Gracias, Suso

Josefina dijo...

¡Me encantó! Tanto el poema como la historia que hay detrás.

Cristina Brackelmanns dijo...

Hola Josefina, me alegra verte. Bueno, leerte, saber de ti.
Hay muchas muchas historias como esas de las que se sabe muy poco.
Gracias, un abrazo.