"Hablar sobre el Espíritu Santo es más difícil que hacerlo sobre Cristo o sobre el Padre. El Espíritu Santo parece evadirse y decirnos: “No yo, sino el Hijo”. Es el Dios humilde, el Poder oculto que nada quiere para sí, sino sólo recibir lo que es de Cristo para dárnoslo a nosotros. De ahí que sea más fácil comprender al Espíritu Santo con el corazón que con la mente… Notemos, por último, el estrecho vínculo que hay entre el Espíritu Santo y la esperanza cristiana. Nuestra existencia está sumida en la indigencia y la oscuridad. La fe nos dice que en nosotros tiene lugar un acontecimiento misterioso: La creación de un hombre nuevo, configurado a imagen de Cristo, y de un nuevo cielo y una nueva tierra, de la que habla al final el Apocalipsis. Pero este acontecimiento sucede ocultamente, y cuanto vemos fuera y dentro de nosotros contradice ese mensaje. Por eso necesitamos la esperanza, y ésta la otorga el Espíritu Santo. Él es quien hace posible el acontecimiento antedicho, por ser el nuevo creador de lo ya creado."
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(Romano Guardini, Introducción a la vida de oración)
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"...Lléname de tu gracia. Tú me creaste; créame de nuevo"
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(Romano Guardini, Oración de la mañana. En Cartas sobre la formación de sí mismo)
2 comentarios:
Esta oración de la mañana es preciosa, dónde podría encontrar un libro de oraciones de este tipo???? Tengo Muestrame tu rsotro de Ignacio Larrañaga, que me encanta. Gracias un saludo
Sí que lo es, Pablo, hay días en los que nos hace falta (pedirlo y ser creados de nuevo) sólo para poder plantar el pie en suelo.
Creo que te gustaría la "Introducción a la vida de oración" de Guardini. La tienes en Edic.Palabra, con una presentación muy buena de López Quintás, y se le puede echar un ojo en Google Books.
Me gustó mucho tu poema vikingo. Y también Larrañaga.
Un abrazo y gracias mil.
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